Un sedante es un depresor que disminuye la excitación y la irritabilidad.
Hay distintos tipos de sedantes:
Algunos sedantes pueden actuar muy rápido, normalmente en 10-15 minutos. Quienes se planteen tomar sedantes deben hablar con su médico, que puede indicarles los sedantes más adecuados para ellos.
La mayoría de los sedantes son muy adictivos, por lo que se necesita una receta médica para obtenerlos.
Si toman somníferos durante mucho tiempo, pueden volverse adictos. Deshacerse de la adicción es muy difícil. Adicción significa que las personas que toman la droga no pueden dejar de tomarla, sin malas consecuencias (como se describe a continuación). Es como la gente que quiere dejar de fumar, pero que no puede.
Las personas que han tomado sedantes pueden parecer embotadas y somnolientas. Dado que los somníferos actúan sobre su capacidad de reacción, quienes los han tomado no deben hacer lo siguiente:
Algunas personas son adictas a los sedantes. Cuando dejan de tomarlos, pueden experimentar lo siguiente
Algunas adicciones también pueden ser psicológicas; cuando los consumidores dejan de tomar la droga, pueden sentirse deprimidos.